01 -
Con un tenedor, aplasta el plátano hasta que quede cremoso y luego colócalo en un recipiente de vidrio o frasco con tapa.
02 -
Vierte en el frasco tu leche vegetal favorita, las semillas de chía, miel (o agave), la crema de cacahuate y la canela.
03 -
Revuelve bien toda la mezcla de chía para que todo se combine. Cierra el recipiente con la tapa y refrigera durante unas 2-3 horas o incluso toda la noche. El pudín debe quedar espesito, no líquido. Si te acuerdas, revuelve otra vez antes de dormir para deshacer los grumos.
04 -
Cuando lo tengas listo para comer, añade encima un poco de yogur de vainilla, un remolino de crema de cacahuate o unas rebanadas de plátano.
05 -
Guarda el pudín en un recipiente hermético en el refri y consúmelo en 5 días.