01 -
Pela las manzanas, quítales el corazón y córtalas en gajos de 1/2 pulgada. Rocía medio limón sobre los trozos y mezcla para evitar que se oxiden.
02 -
En una sartén de hierro fundido, derrite la mantequilla a fuego medio hasta que burbujee.
03 -
Añade los gajos de manzana a la sartén. Espolvorea con azúcar moreno, canela y una pizca de sal.
04 -
Tapa la sartén y cocina a fuego medio durante unos 15 minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que las manzanas estén tiernas y caramelizadas.
05 -
Cuando las manzanas estén blanditas y caramelizadas, retira del fuego. Sirve caliente como guarnición o postre.