01 -
Calienta una sartén grande a fuego medio-alto. Cocina la carne molida junto con la cebolla picada, agregando sal y pimienta al gusto. Remueve hasta que la carne no esté rosada. Si es necesario, retira el exceso de grasa que se genere.
02 -
Pon la sartén de nuevo en el fuego. Agrega el ajo en polvo y el condimento para tacos, mezclando bien para envolver la carne con los sabores.
03 -
Integra el arroz aún crudo, el caldo de carne, el maíz ya escurrido, la salsa de tomate frito y la salsa tipo mexicana, removiendo todo para que se distribuya uniformemente.
04 -
Deja que la mezcla hierva. Cuando ya esté burbujeando, tapa la sartén y baja el fuego. Cocínalo a fuego lento durante 18-20 minutos, hasta que el arroz esté suave y listo.
05 -
Quita la tapa, espolvorea el queso rallado encima y vuelve a tapar la sartén por unos 2-3 minutos más. Espera a que el queso se derrita y quede cremoso.
06 -
Sirve caliente y decora al gusto con cilantro fresco, crema ácida o rodajas de jalapeño si te apetecen.