01 -
Precalienta el horno a 190°C (375°F). Engrasa ligeramente un recipiente para hornear.
02 -
Enjuaga los pimientos y corta las partes superiores para crear una tapa. Retira con cuidado las semillas y las membranas del interior de cada uno.
03 -
Si te gustan más suaves, hierve los pimientos en agua con sal por 3-4 minutos. Escúrrelos y deja que enfríen un poco antes de rellenarlos.
04 -
Calienta el aceite de oliva a fuego medio en una sartén grande. Cocina el ajo, la cebolla, el apio y los champiñones (si los estás usando) unos 5-7 minutos, hasta que estén suaves y aromáticos.
05 -
En un tazón grande, mezcla el camarón picado, la carne de jaiba, el pan rallado, el tomillo, el pimentón dulce, el perejil, el jugo de limón, sal y pimienta. Asegúrate de que todo quede bien integrado.
06 -
Llena cada pimiento preparado con la mezcla de mariscos. Presiona suavemente para que queden bien rellenos pero sin aplastarlos.
07 -
Espolvorea queso rallado encima de cada pimiento relleno. Echa un poco de caldo de pollo (o de verduras) en la base del recipiente para evitar que los pimientos se resequen durante la cocción.
08 -
Cubre el recipiente con papel aluminio, dejando un pequeño espacio para que el vapor salga. Hornea los pimientos durante 20-25 minutos o hasta que estén tiernos y el relleno bien caliente.
09 -
Quita el papel aluminio y pasa los pimientos al modo gratinado en el horno. Déjalos 2-3 minutos más, hasta que el queso esté dorado y burbujeante.
10 -
Deja que los pimientos se enfríen un poco antes de servir. Acompáñalos con arroz o algún aderezo que te guste.