
Ingredientes
- Nata para montar: 2 vasos de nata montada logran una textura aireada en la mezcla cremosa.
- Azúcar glass: 1/4 taza para darle dulzor al sirope de piña y complementar el propio dulzor de la fruta.
- Zumo de piña: Se usa 1 vaso para preparar una salsa espesa y dulce que se mezcla con el relleno.
- Queso crema: Unos 2 vasos de queso crema a temperatura ambiente aportan el sabor característico y un punto ácido al relleno.
- Piña en trozos: Para decorar y aportar frescura en cada porción, añade 2 vasos de piña (puede ser natural o de lata).
- Gelatina neutra: 1 sobre para asegurar que el postre cuaje bien.
- Mantequilla sin sal: Media taza de mantequilla derretida une las galletas para una base consistente.
- Azúcar blanca: 1 vaso para endulzar el relleno y equilibrar el sabor del queso crema.
- Esencia de vainilla: 1 cucharadita con un toque cálido mejora el aroma y el sabor final.
- Fécula de maíz: Unas 2 cucharadas para que la salsa de piña quede con la textura ideal.
- Galletas María trituradas: 2 vasos bien machacados como base crujiente en vez de galleta graham (más fácil de encontrar aquí).
Instrucciones
- Paso 1:
- Pon la gelatina en 1/4 de vaso de agua fría y deja que hidrate unos minutos. Reserva para luego.
- Paso 2:
- Bate el queso crema con el azúcar blanca hasta que esté suave y sin grumos en un bol grande. Déjalo apartado.
- Paso 3:
- Monta la nata en otro recipiente hasta que forme picos firmes. Luego júntala suave con la mezcla de queso para que se conserve esponjosa.
- Paso 4:
- Mezcla en un cazo el zumo de piña, azúcar glass y fécula de maíz, removiendo a fuego medio hasta ver la salsa más espesa. Saca del fuego y deja que temple un rato.
- Paso 5:
- Vierte la gelatina hidratada sobre la salsa tibia y remueve hasta que no queden grumos. Así se mezcla fácil después.
- Paso 6:
- Incorpora la salsa de piña ya fría al relleno de queso y nata. Mezcla con movimientos envolventes para no perder el aire.
- Paso 7:
- Por último, prepara la base triturando las galletas María y mezclándolas con la mantequilla derretida. Presiona en el fondo de tu molde desmoldable de unos 23 cm. Vierte la mezcla de queso encima y alisa un poco.
- Paso 8:
- Guarda al frigo unas 4 horas o mejor toda la noche para que cuaje perfectamente. Al presentar, corona con los trozos de piña por encima para un toque refrescante.
Trucos para servir y guardar
- Sácalo bien frío para disfrutar de la textura y el sabor. El toque de piña fresca encima lo convierte en un postre muy agradable.
- Guárdalo en el frigo tapado con film si lo haces con antelación. Aguanta perfecto tres días sin perder sabor ni textura.
- ¿Quieres que luzca más bonito? Añade unas hojas de menta fresca o coco rallado tostado justo antes de servir.
- Se puede congelar sin problema, bien envuelto en film y dentro de un recipiente hermético durante dos meses. Déjalo en la nevera la noche anterior para descongelar de a poco.
Consejos útiles
- Saca el queso crema con tiempo para que mezcle mejor y no salgan grumos.
- Puedes probar y añadir más azúcar glass al sirope si lo tuyo es el toque más dulce.
- Si tienes ganas de saltarte el horno, simplemente presiona la base de galleta y mantequilla en el molde y refrigera. Aguanta bien tras el enfriado en nevera.
Secretos de chefs conocidos
- La chef Ina Garten apuesta por una buena esencia de vainilla para realzar el sabor final.
- Gordon Ramsay aconseja dejar el postre en la nevera toda la noche para que se asiente bien y los sabores se mezclen.
- Nigella Lawson echa una pizca de sal a la base de galleta para potenciar el sabor de la mantequilla y equilibrar el dulzor.