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Las setas fritas son un aperitivo tradicional que siempre encanta a todos. Estos bocados crujientes quedan perfectos para fiestas, días de partido o como acompañamiento de tus platos preferidos. La mezcla de un rebozado ligero y crujiente con el sabor terroso de las setas crea un tentempié sabroso y satisfactorio. Esta preparación te guiará paso a paso para lograr unas setas fritas doraditas y deliciosas cada vez.
Lo que hace especial esta receta es el uso de cerveza en la masa, que aporta una profundidad de sabor única y una textura esponjosa. La combinación de condimentos como ajo en polvo, cebolla en polvo, sal y pimienta realza el sabor natural de las setas, haciendo cada bocado irresistible. Con unos pocos ingredientes simples y herramientas básicas de cocina, puedes crear un plato que seguro sorprenderá a tus amigos y familia.
Ingredientes
Necesitarás estos ingredientes para preparar unas setas fritas crujientes:
- 450 gramos de champiñones pequeños, con los tallos recortados
- 1 1/2 tazas de harina normal, dividida
- 1 taza de cerveza (cualquier cerveza rubia va bien)
- 2 1/2 cucharaditas de sal gorda
- 3/4 cucharadita de pimienta negra
- 1/4 cucharadita de ajo en polvo
- 1/4 cucharadita de cebolla en polvo
- Aceite para freír (girasol, oliva suave o maíz)
- 1 cucharada de perejil fresco picado (para decorar)
Cada ingrediente tiene su función en el plato final. Los champiñones aportan una base sustanciosa, mientras la harina y la cerveza crean un rebozado ligero y crujiente. Las especias dan profundidad y complejidad al sabor, y el perejil fresco añade un toque de color y frescura.
Instrucciones
Sigue estos pasos detallados para crear unas setas fritas perfectamente crujientes:
Prepara el Aceite
Empieza calentando unos 8 centímetros de aceite en una olla honda hasta 190°C. Un termómetro te ayudará a mantener la temperatura correcta, así las setas se freirán uniformemente y quedarán crujientes sin absorber demasiado aceite.
Cubre los Champiñones
Mientras se calienta el aceite, prepara los champiñones recortando los extremos. Pásalos por 1/2 taza de harina, asegurándote que queden bien cubiertos. Sacude el exceso de harina, esto ayuda a que la masa se adhiera mejor.
Prepara la Masa
En un bol mediano, mezcla la taza restante de harina con la cerveza, sal gorda, pimienta negra, ajo en polvo y cebolla en polvo. Remueve hasta conseguir una masa suave. La cerveza no solo da sabor sino que también ayuda a crear una textura ligera y esponjosa.
Reboza los Champiñones
Mete cada champiñón enharinado en la masa, dejando que el sobrante gotee de vuelta al bol. Este paso asegura una capa fina y uniforme que quedará muy crujiente.
Fríe los Champiñones
Pon con cuidado 4-5 champiñones a la vez en el aceite caliente. Fríelos hasta que estén dorados y crujientes, lo que debería llevar unos 7 minutos. Usa una espumadera para sacar los champiñones del aceite y colócalos en un plato con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Repite el Proceso
Sigue friendo el resto de champiñones por tandas, sin amontonar demasiados en la olla, ya que esto puede bajar la temperatura del aceite y dar como resultado unas setas blandas.
Sirve al Momento
Cuando todas las setas estén fritas, espolvoréalas con perejil fresco picado para darles color y un toque de frescura. Sírvelas al momento para disfrutar de su textura crujiente y sabor intenso.
Consejos para Servir y Conservar
Sirve estas setas fritas calientes y recién hechas para disfrutar de su exterior crujiente y sabor terroso. Acompáñalas con alguna salsa como alioli, salsa brava o rosa para un extra de sabor. Si te sobran, guárdalas en un recipiente hermético en la nevera hasta 3 días. Recaliéntalas en el horno precalentado a 175°C durante 10-15 minutos para recuperar su textura crujiente.