
El Espárrago al Horno con Queso es un platillo complementario fácil y delicioso que combina el sabor fresco y crujiente del espárrago con la cremosidad del queso derretido. Este acompañamiento va perfecto para cualquier evento, ya sea una cena familiar, una celebración festiva o una comida casual entre semana. La mezcla de nata, ajo, queso parmesano y mozzarella crea un perfil de sabor abundante y sabroso que realza el gusto natural del espárrago. Veamos los ingredientes que hacen este plato tan tentador.
Ingredientes
Aquí está el detalle de los ingredientes que necesitarás para preparar Espárrago al Horno con Queso:
- 1 kg de espárragos, con tallos recortados: Los espárragos frescos son lo principal en este platillo. No olvides cortar las puntas leñosas para lograr mejor textura y sabor.
- 180 ml de nata para cocinar: Añade suavidad y textura cremosa que une el queso y el ajo.
- 3 dientes de ajo, picados: El ajo brinda un aroma fantástico que mejora el sabor general del plato.
- Sal marina: Fundamental para sazonar y resaltar los sabores naturales del espárrago y el queso.
- Pimienta negra recién molida: Aporta un calor sutil y mejora las notas sabrosas del platillo.
- 1 taza de queso parmesano rallado fresco: El parmesano se derrite estupendamente y aporta un sabor intenso que va genial con los espárragos.
- 1 taza de queso mozzarella rallado: La mozzarella da una textura suave y pegajosa que hace este plato super goloso.
- Escamas de chile, para decorar (opcional): Dan un toque picante y color, haciendo el plato visualmente atractivo y con un pequeño kick picoso.
Instrucciones
Paso 1: Calienta el Horno
Calienta tu horno a 200°C. Un precalentamiento adecuado ayuda a que los espárragos se cocinen parejo y el queso se derrita perfecto.
Paso 2: Prepara los Espárragos
Recorta los tallos de los espárragos para quitar las puntas duras y leñosas. Coloca los espárragos recortados en una bandeja de horno de 23x33 cm, ordenándolos en una sola capa. Esto permitirá que se cocinen uniformemente.
Paso 3: Agrega la Nata y el Ajo
Vierte los 180 ml de nata sobre los espárragos, asegurándote que queden bien cubiertos. Esparce el ajo picado por encima. La nata ayudará a que el queso se pegue a los espárragos y creará una base rica y cremosa.
Paso 4: Sazona
Echa bastante sal marina y pimienta negra recién molida a los espárragos. Un buen sazonado es clave para realzar los sabores naturales y equilibrar la riqueza de la nata y el queso.
Paso 5: Añade el Queso
Espolvorea 1 taza de queso parmesano rallado fresco y 1 taza de queso mozzarella rallado de manera uniforme sobre los espárragos. El parmesano da un sabor intenso, mientras que la mozzarella aporta una textura cremosa que se deshace en la boca. Si te gusta un poco de picante, añade escamas de chile por encima.
Paso 6: Hornea
Mete la bandeja en el horno precalentado y hornea durante 25 a 30 minutos, o hasta que el queso esté dorado y burbujeante y los espárragos estén tiernos. El queso debe formar una deliciosa costra dorada encima, mientras los espárragos quedan perfectamente cocinados y sabrosos.
Paso 7: Sirve
Cuando esté listo, saca el plato del horno y déjalo enfriar unos minutos antes de servir. Esto permite que el queso se asiente un poco, facilitando servir. Pasa los espárragos con queso a una fuente o sírvelos directamente de la bandeja.
Consejos para Servir y Guardar
El Espárrago al Horno con Queso sabe mejor recién salido del horno, pero también puede guardarse y recalentarse para disfrutarlo después. Aquí hay algunos consejos para servir y guardar este delicioso acompañamiento:
- Para servir: Sirve el Espárrago al Horno con Queso inmediatamente después de hornear para disfrutar del queso derretido y los espárragos tiernos en su mejor momento. Este plato combina muy bien con varios platos principales, como pollo a la parrilla, bistec o pescado. Para una comida completa, prueba servirlo con patatas asadas o una ensalada fresca.
- Para guardar: Si te sobra, deja que los espárragos se enfríen totalmente antes de guardarlos. Pon las sobras en un recipiente hermético y refrigera hasta por 3 días. Así será fácil recalentarlos y disfrutarlos después.
- Para recalentar: Para recalentar, coloca los espárragos en una bandeja para horno y caliéntalos a 175°C durante unos 10-15 minutos, o hasta que estén bien calientes. También puedes recalentar porciones individuales en el microondas durante 1-2 minutos, aunque el método del horno mantiene mejor la cobertura crujiente de queso.