
El Pollo Parmesano estilo Longhorn es un plato sabroso y con mucho queso que trae los sabores de tu restaurante preferido directo a tu cocina. Con pechugas de pollo tiernas cubiertas en una costra crujiente de pan y queso parmesano, coronadas con una mezcla deliciosa de mozzarella y ajo, este plato seguro será un éxito en la mesa.
Ingredientes
- Pechugas de Pollo Sin Hueso y Sin Piel: 4, la proteína principal del plato, que proporciona una base jugosa y suave.
- Queso Parmesano Rallado: 1 taza, dividida, aporta un sabor rico y a nuez al empanado y a la cobertura.
- Queso Mozzarella Rallado: 1 taza, se derrite sobre el pollo para un acabado cremoso y con queso.
- Migas de Pan: 1 taza, usadas para crear una cubierta crujiente para el pollo.
- Harina Normal: 1/2 taza, ayuda a que la mezcla de huevo se pegue al pollo.
- Huevos: 2 grandes, batidos con leche para crear un agente de unión para el empanado.
- Leche: 1/4 taza, combinada con huevos para una mezcla de cobertura suave.
- Ajo Picado: 2 dientes, mezclado con queso para añadir una explosión de sabor.
- Condimento Italiano Seco: 1 cucharadita, añade una mezcla aromática de hierbas a la mezcla de pan rallado.
- Sal: 1/2 cucharadita, sazona el pollo y mejora el sabor general.
- Pimienta Negra: 1/4 cucharadita, añade un toque sutil al plato.
- Aceite de Oliva: 2 cucharadas, usado para cocinar el pollo hasta que quede dorado perfecto.
Instrucciones
- Paso 1:
- Calienta tu horno a 190°C y engrasa un recipiente para hornear con aceite de oliva para que el pollo no se pegue.
- Paso 2:
- En un plato poco profundo, mezcla el pan rallado, 1/2 taza de queso parmesano rallado, condimento italiano, sal y pimienta negra. Esta mezcla formará la cobertura crujiente y sabrosa para el pollo.
- Paso 3:
- En otro plato poco profundo, bate los huevos junto con la leche. Esta mezcla de huevo ayudará a que las migas de pan se adhieran a las pechugas de pollo.
- Paso 4:
- Coloca la harina en un tercer plato poco profundo. Este será el primer paso en cubrir el pollo, ayudando a que la mezcla de huevo se pegue a la superficie.
- Paso 5:
- Pasa cada pechuga de pollo por la harina, sacudiendo el exceso. Esto asegura una capa ligera y uniforme que sostendrá la mezcla de huevo.
- Paso 6:
- Sumerge las pechugas enharinadas en la mezcla de huevo, cubriéndolas completamente. Luego, presiona el pollo en la mezcla de pan rallado, asegurándote de una cobertura uniforme por todos lados.
- Paso 7:
- En una sartén, calienta el aceite de oliva a fuego medio-alto. Una vez caliente, añade las pechugas de pollo y cocínalas durante 3-4 minutos por cada lado, hasta que estén doradas. Esto dará al pollo un exterior crujiente mientras retiene los jugos.
- Paso 8:
- Transfiere las pechugas doradas al recipiente para hornear preparado. Este plato irá al horno para terminar.
- Paso 9:
- En un tazón pequeño, mezcla la 1/2 taza restante de queso parmesano rallado con el queso mozzarella rallado y el ajo picado. Esta mezcla de quesos se derretirá sobre el pollo, añadiendo una deliciosa cobertura.
- Paso 10:
- Espolvorea la mezcla de queso uniformemente sobre las pechugas de pollo en el recipiente para hornear. Asegúrate de que cada pieza esté generosamente cubierta para el mejor sabor.
- Paso 11:
- Hornea el pollo en el horno precalentado durante 20-25 minutos, o hasta que esté bien cocido y el queso esté derretido y burbujeante. La temperatura interna del pollo debe alcanzar los 74°C.
- Paso 12:
- Una vez horneado, saca el pollo del horno y déjalo reposar unos minutos antes de servir. Esto permite que los jugos se redistribuyan, asegurando un pollo jugoso y sabroso.