
Estos rollitos primavera dorados combinan pollo tierno y vegetales crujientes envueltos en una masa perfectamente crujiente. Cada bocado ofrece una textura crujiente seguida de un relleno sabroso y bien sazonado que supera a las versiones de restaurante.
Durante mi última reunión familiar, estos rollitos primavera desaparecieron tan rápido que tuve que hacer una segunda tanda. La combinación de vegetales frescos y pollo sazonado creó un aroma tan irresistible que todos se reunieron en la cocina esperando la siguiente hornada.
Selección de Ingredientes Esenciales
- Pollo: Ya sea pechuga fresca o pollo asado sobrante, asegúrate que esté bien deshebrado y jugoso. Si cocinas pollo fresco, déjalo ligeramente crudo ya que terminará de cocinarse durante la fritura.
- Repollo: Elige repollo blanco fresco y crujiente con hojas firmes. El corazón debe estar fresco y blanco sin partes marrones.
- Obleas: Selecciona obleas de trigo para rollitos, no papel de arroz. Deben ser flexibles y frescas, sin bordes secos.
- Verduras: Las zanahorias y demás verduras deben estar crujientes y brillantes. Córtalas uniformemente para una cocción pareja.
- Aceite: Usa aceite neutro con alto punto de humo como el de girasol o cacahuete para freír.
Preparación de los Rollitos
- Preparación del Relleno:
- Comienza deshilachando el pollo en trozos finos y uniformes. Combina con el repollo rallado fino y zanahorias en juliana, asegurando una distribución uniforme. Cada componente debe tener tamaño similar para una textura adecuada.
- Técnica del Envoltorio:
- Coloca cada oblea como un diamante sobre tu superficie de trabajo. Mantén las obleas restantes cubiertas con un paño ligeramente húmedo para evitar que se sequen. La oblea debe estar flexible pero no mojada.
- Proceso de Enrollado:
- Coloca exactamente dos cucharadas de relleno ligeramente por debajo del centro. Dobla la esquina inferior sobre el relleno, tirando suavemente hacia atrás para crear tensión. Dobla las esquinas laterales firmemente, creando forma de sobre.
- Sellado Final:
- Enrolla hacia arriba con presión constante, manteniendo el relleno compacto. La esquina final debe sellarse con agua, asegurando que ningún relleno pueda escapar durante la fritura.

Mi abuela me enseñó que el secreto de los rollitos primavera perfectos está en lo apretado del rollo - demasiado suelto y quedarán blandos, demasiado apretado y reventarán.
Tiempo Perfecto
Monitorea cuidadosamente la temperatura del aceite - 175°C es lo ideal. Fríe en pequeñas tandas, aproximadamente 3-4 minutos por lado hasta que estén dorados.
Servir con Estilo
Sirve inmediatamente mientras están crujientes, ordenados en una fuente con variedad de salsas para mojar. Córtalos en diagonal para presentación como aperitivo.
Hazlos a Tu Gusto
Experimenta con diferentes verduras o condimentos en el relleno. Considera agregar castañas de agua para más crujiente.
Éxito en el Almacenamiento
Mantén los rollitos sin cocinar separados por papel de horno en el refrigerador. Una vez fritos, recalienta en horno o freidora de aire para mantener el crujiente.

Después de preparar incontables tandas de rollitos primavera, he aprendido que el éxito está en la preparación y la técnica. Cuando se hacen correctamente, estos rollitos caseros traen la calidad de restaurante directamente a tu mesa.
Preguntas Frecuentes
- → Puedo prepararlos con antelación
- Claro, el relleno puede estar listo antes, pero forma y fríe los rollitos justo antes de comer para mantenerlos crujientes.
- → Es posible hornearlos en vez de freírlos
- Sí, úntalos con un poco de aceite y hornéalos a 200°C entre 15 y 20 minutos, dándoles la vuelta a la mitad del tiempo.
- → Es posible congelar los rollitos
- Puedes congelarlos sin freír. Colócalos en una bandeja hasta que estén firmes y luego guárdalos en una bolsa. Fríelos congelados y añade unos minutos extra de cocción.
- → Que puedo usar en lugar de pollo
- Si prefieres, reemplázalo por camarón, cerdo o tofu. Cualquiera de estos funciona perfecto.
- → Por qué explotan los rollitos al freírlos
- Asegúrate de cerrar bien los bordes y no rellenarlos de más. También evita enrollarlos muy apretados para permitir que salga el vapor.