El Pollo Hasselback es un plato sofisticado y sabroso, perfecto tanto para una cena entre semana como para una ocasión especial. Esta preparación trae pechugas de pollo en cortes que permiten rellenarlas con una mezcla deliciosa de espinacas y queso ricotta, cubiertas con queso cheddar derretido y un toque de pimentón para darle color y sabor extra. El resultado es una comida visualmente impresionante que dejará boquiabiertos a todos en la mesa. Vamos a ver qué necesitamos para crear esta maravilla culinaria.
Ingredientes
- 50 g de espinacas frescas: Las espinacas aportan un color verde vibrante y un ligero toque terroso al plato.
- 50 g de queso ricotta: El queso ricotta da un relleno suave y cremoso que va genial con las espinacas.
- 2 pechugas de pollo: La base principal del plato, las pechugas se cortan y rellenan para lograr una experiencia jugosa y llena de sabor.
- 20 g de queso manchego rallado: Este queso se derrite maravillosamente encima, dando un acabado rico y sabroso.
- 1 cucharadita de pimentón: El pimentón no solo añade un poco de calor sino también un bonito color rojizo al plato.
- Sal al gusto: Fundamental para sazonar el pollo y resaltar todos los sabores.
- Pimienta al gusto: Añade un toque picante sutil que complementa los demás ingredientes.
Con estos ingredientes, ya estás listo para crear un Pollo Hasselback impresionante que seguro se convertirá en uno de tus favoritos. A continuación, te mostramos paso a paso cómo preparar y cocinar este plato a la perfección.
Instrucciones
- Paso 1: Preparar la mezcla de espinacas
- Cocinar las espinacas: Calienta un chorrito de aceite en una sartén a fuego medio. Echa 50 g de espinacas frescas y cocínalas unos 3-5 minutos hasta que se marchiten un poco.
- Añadir ricotta: Incorpora 50 g de queso ricotta y cocina 30-60 segundos más. Aparta del fuego y deja que la mezcla se enfríe.
- Paso 2: Preparar el pollo
- Cortar el pollo: Toma 2 pechugas y haz cortes de 1 cm de separación, sin llegar al fondo. Procura cortar solo hasta un 75% del grosor.
- Rellenar el pollo: Mete la mezcla de espinacas y ricotta ya enfriada entre los cortes.
- Paso 3: Sazonar y añadir queso
- Sazonar el pollo: Espolvorea sal y pimienta al gusto sobre las pechugas rellenas.
- Añadir queso: Ralla 20 g de queso manchego y ponlo generosamente por encima del pollo.
- Espolvorear pimentón: Añade 1 cucharadita de pimentón por encima para dar color y sabor.
- Paso 4: Hornear
- Precalentar el horno: Calienta tu horno a 200°C.
- Hornear el pollo: Coloca las pechugas preparadas en el centro del horno y cocina durante 20-25 minutos hasta que el queso esté burbujeante y los jugos del pollo salgan claros.
- Paso 5: Servir
- Emplatar y servir: Saca con cuidado el pollo del horno. Déjalo reposar unos minutos antes de servirlo.
Con estas instrucciones, tendrás un Pollo Hasselback perfectamente cocinado listo para deleitar a tu familia y amigos. A continuación, veremos algunos consejos para servir y guardar el plato, así como notas útiles y variaciones para mejorar tu experiencia culinaria.
Consejos para servir y conservar
El Pollo Hasselback no solo está buenísimo recién salido del horno, sino que también se conserva bien para futuras comidas. Aquí van algunos trucos para servir y guardar tu pollo manteniendo todo su sabor y frescura.
- Para servir: Disfruta el Pollo Hasselback caliente, recién sacado del horno. Este plato queda genial con una ensalada verde fresca, verduras asadas o un acompañamiento de puré de patatas con ajo. El queso derretido y el relleno cremoso de espinacas y ricotta lo convierten en el protagonista perfecto de cualquier comida.
- Para guardar: Si te sobra algo, deja que el pollo se enfríe completamente antes de guardarlo. Mételo en un recipiente hermético y guárdalo en la nevera hasta 3 días. Así mantendrás la textura y el sabor del pollo.
- Para recalentar: Coloca el pollo en un plato que pueda ir al horno y cúbrelo con papel aluminio para que no se seque. Caliéntalo en el horno precalentado a 175°C durante unos 15-20 minutos, o hasta que esté bien caliente. También puedes calentarlo en el microondas a potencia media durante 2-3 minutos, aunque puede quedar un poco más blando.
Notas útiles y variaciones
- Rellenos alternativos: Prueba con distintos rellenos como tomates secos y queso de cabra, o una mezcla de champiñones salteados y queso crema. Estas variaciones añaden sabores y texturas únicas al plato.
- Opciones de queso: Aunque el manchego es una elección clásica, puedes probar con mozzarella, queso idiazábal o incluso una mezcla de quesos para un perfil de sabor diferente.
- Añadidos de hierbas: Agrega hierbas frescas o secas como tomillo, romero o perejil a la mezcla de espinacas y ricotta para una capa extra de sabor.
- Dale picante: Si te gusta el picor, espolvorea un poco de chile en hojuelas o unas gotas de salsa picante sobre el pollo antes de hornearlo.
Como diría un buen cocinero, ¡qué fácil es esto! Disfruta preparando y compartiendo esta receta de Pollo Hasselback con tu familia y amigos. Seguro que se convertirá en una favorita gracias a su deliciosa combinación de sabores y su elegante presentación.
Conclusión
El pollo Hasselback lleva pechugas tiernas rellenas de una mezcla sabrosa de espinacas y ricotta, con queso cheddar derretido encima y un toque de pimentón. Es un plato elegante que puedes preparar en 35 minutos.