Disfruta un rollo con colores de miedo y crema por dentro, genial para estos días de Halloween. Diviértete armándolo y decorándolo a tu modo.
01
4 huevos grandes.
02
1/2 taza de azúcar blanca.
03
1/4 taza de aceite vegetal.
04
1/4 taza de leche.
05
1 cucharadita de esencia de vainilla.
06
1 taza de harina de trigo.
07
1 cucharadita de polvo para hornear.
08
Colorante para alimentos (naranja, morado, negro).
09
Chispas comestibles temáticas de Halloween (opcional).
10
1 taza de crema para batir.
11
1/4 taza de azúcar glas.
12
1 cucharadita de vainilla líquida.
13
1 taza de crema batida o betún (teñido de morado o negro).
14
Decoraciones comestibles o chispas con diseño de Halloween.
15
Ojos de caramelo o decoraciones llamativas y comestibles.
Paso 01
Enciende el horno a 175°C (350°F). Coloca papel encerado en una charola de 10x15 pulgadas y engrásalo ligeramente.
Paso 02
En un bol grande, bate los huevos junto con el azúcar hasta que la mezcla sea esponjosa y clarita, unos 3-4 minutos. Añade leche, esencia de vainilla y el aceite. Mezcla bien.
Paso 03
Cierne la harina junto con el polvo de hornear y agrégalo a la mezcla, mezclándolo suavemente hasta que se combine por completo.
Paso 04
Separa la mezcla en tres recipientes diferentes y tiñe cada uno con un color (naranja, morado y negro). Luego, distribuye las mezclas alternándolas en franjas dentro del molde preparado.
Paso 05
Lleva al horno durante unos 10-12 minutos. Cuando la superficie del pastel se sienta elástica al tacto, retíralo. Coloca azúcar glas sobre un paño limpio, enrolla el pastel caliente en el paño y deja que enfríe.
Paso 06
Bate la crema para batir junto con el azúcar glas, la vainilla y algún colorante (si lo deseas) hasta que obtengas una textura firme.
Paso 07
Desenrolla el pastel, unta el relleno y vuelve a enrollarlo con cuidado. Cubre todo con el betún negro o morado, y añade decoraciones de Halloween al gusto.
Paso 08
Corta el pastel y ofrece un postre divertido y colorido para Halloween.