La sopa cremosa de pollo con brócoli y queso es un plato reconfortante que mezcla trocitos de pollo suave, brócoli sabroso y queso derretido en un tazón abundante. Perfecta para cenar cuando hace frío, te da calor y nutrientes. Fácil de hacer y llena de sabor, seguro se volverá la favorita de todos en casa.
INGREDIENTES
- 1 cucharada de aceite de oliva: Para dorar el pollo.
- 1 libra de pechuga de pollo sin piel ni hueso: Da la base proteica a la sopa.
- 1/2 cucharadita de pimienta negra: Aporta un toque picante.
- 1/2 cucharadita de pimentón ahumado: Le da un matiz ahumado al sabor.
- 6 tazas de caldo de pollo: Forma la base saborosa de la sopa.
- 1 taza de arroz: Añade textura consistente a la sopa.
- 400 gramos de brócoli congelado: Proporciona vegetales nutritivos.
- 2 cucharadas de mantequilla sin sal: Ayuda a crear la base espesante.
- 2 cucharadas de harina: Espesa la sopa hasta lograr cremosidad.
- 225 gramos de queso manchego rallado: Da un sabor rico y quesoso.
PASOS A SEGUIR
- Paso 1:
- Pon a calentar una olla grande a fuego medio-alto. Corta el pollo en trozos pequeños.
- Paso 2:
- Vierte el aceite y añade el pollo. Espolvorea la pimienta y el pimentón encima. Mueve y cocina hasta que el pollo esté doradito, unos 5 minutos. Agrega el caldo y tapa. Deja hervir.
- Paso 3:
- Incorpora el arroz y el brócoli. Vuelve a tapar y cocina hasta que el arroz esté casi tierno, aproximadamente 8-10 minutos.
- Paso 4:
- Mientras tanto, mezcla la mantequilla y la harina en un platito. Aplástalos con un tenedor hasta que se junten bien.
- Paso 5:
- Añade esta mezcla a la sopa. Revuelve para integrarla.
- Paso 6:
- Agrega el queso. Revuelve y baja el fuego. Deja que la sopa se caliente mientras pones la mesa, unos 5 minutos. La sopa se irá espesando mientras reposa.
Consejos para servir y guardar
La sopa cremosa de pollo con brócoli y queso sabe mejor calentita, recién salida de la olla. Este plato contundente va genial con pan crujiente o una ensaladita para una comida completa. Si quieres adornarla, ponle un poco más de queso rallado o hierbas frescas como perejil o cebollino por encima antes de servir.
Si te sobra, guarda la sopa en un recipiente cerrado en la nevera hasta por 3 días. Para recalentarla, ponla a fuego medio en la estufa, removiendo de vez en cuando para que se caliente parejo. Quizás necesites añadir un chorrito de caldo o agua para que quede como te gusta, ya que la sopa suele espesarse en la nevera.
Trucos útiles
Para un sabor más intenso, prueba usar una mezcla de quesos como manchego curado e ibérico. Si prefieres una sopa más espesa, echa más harina al preparar la base. Añadir unas gotitas de salsa picante o una pizca de cayena le da un toque picantito para los que buscan algo de calor. Según los chefs, usar brócoli fresco en vez de congelado mejora mucho la textura y el sabor de la sopa. Solo tienes que escaldar el brócoli fresco antes de echarlo a la olla.