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Si buscas darle un toque sabroso y con queso a tus botanas o comidas, esta Salsa de Queso para Nachos es justo lo que necesitas. Es fácil de hacer y solo toma unos minutos prepararla, perfecta para reuniones de último momento o para picar algo rápido.
INGREDIENTES
- Mantequilla: 2 cucharadas de mantequilla son la base de esta salsa, dándole una textura cremosa y rica.
- Harina: 2 cucharadas de harina se usan para espesar la salsa, asegurando que tenga la consistencia ideal.
- Leche entera: 1 taza de leche entera añade cremosidad y ayuda a mezclar todos los sabores.
- Queso Manchego semicurado: 170 gramos de queso manchego rallado dan a esta salsa su delicioso sabor a queso.
- Sal: 1/4 cucharadita de sal realza los sabores y saca la riqueza del queso.
- Polvo de chile: 1/4 cucharadita de polvo de chile añade un toque picante, dando a la salsa un poco de sabor sin ahogar el sabor del queso.
INSTRUCCIONES
- Paso 1:
- Empieza derritiendo la mantequilla en una olla pequeña a fuego medio. Cuando esté completamente derretida, agrega la harina y bátelos juntos hasta que la mezcla esté burbujeante y espumosa. Esto debería llevar unos 60 segundos. Este paso crea un roux, esencial para espesar la salsa.
- Paso 2:
- Luego, vierte poco a poco la leche entera mientras sigues batiendo para evitar grumos. Sube un poco el fuego y deja que la mezcla hierva a fuego lento. Notarás que la salsa comienza a espesarse mientras hierve. Cuando esté lo suficientemente espesa para cubrir el dorso de una cuchara, quita la olla del fuego.
- Paso 3:
- Con el fuego apagado, incorpora gradualmente el queso manchego rallado. Añádelo en pequeños puñados, revolviendo constantemente para asegurar que el queso se derrita suavemente en la salsa. Si ves que el queso no se derrite por completo, puedes poner la olla a fuego lento, pero ten cuidado de no sobrecalentar la salsa, ya que puede hacer que el queso se separe.
- Paso 4:
- Cuando todo el queso se haya derretido y la salsa esté suave, agrega la sal y el polvo de chile. Estos condimentos mejorarán el sabor del queso y añadirán una ligera nota picante. Prueba la salsa y ajusta el condimento si es necesario. Si la salsa queda muy espesa, puedes siempre aclararla con un chorrito de leche.
Consejos para servir y guardar
- Sirve la salsa de queso caliente para mejor textura y sabor.
- Combínala con totopos, pretzels o viértela sobre nachos.
- Si te sobra, guarda la salsa en un recipiente hermético en la nevera hasta por 3 días.
- Recaliéntala suavemente en la estufa a fuego lento, añadiendo un poco de leche para recuperar la consistencia suave si es necesario.
Notas útiles
- Si prefieres una salsa más picante, agrega más polvo de chile o una pizca de chile de árbol molido.
- Para un sabor más suave, usa queso manchego joven en lugar de semicurado.
- Esta salsa también puede usarse como base para macarrones con queso o como dip para verduras.
Consejos de chefs famosos
- El chef Paco Roncero sugiere añadir un toque de pimentón ahumado para dar a la salsa una profundidad ahumada.
- La chef Samantha Vallejo-Nágera recomienda rallar tu propio queso en lugar de usar queso ya rallado para una salsa más suave.
- El chef Karlos Arguiñano aconseja no dejar que la salsa de queso hierva, ya que esto puede hacer que el queso se corte.